En el libro Come mierda he explicado que como una de las definiciones de mierda de la RAE es «Cosa mal hecha o de mala calidad», tiene sentido usar esta palabra para referirnos a los «alimentos» (entre comillas) ultraprocesados, ya su calidad nutricional es mala tirando a nefasta. La doctora Marion Nestle define con mucho tino las características de estos productos:

  • Producidos industrialmente,
  • Tienen poco parecido con los alimentos de los que se derivaron,
  • Normalmente contienen aditivos para dar color, sabor y textura,
  • No se puede preparar en cocinas domésticas,
  • Están formulados para ser irresistibles,
  • Están asociados con una ingesta excesiva de calorías y mala salud,
  • Son extremadamente rentables para sus creadores.

Pues bien, mi admirada amiga Marina Manera, nutricionista de referencia, acaba de hacerme llegar una recién publicada investigación que da para publicar una segunda parte de mi libro con el título: «Come mierda adictiva».

En el estudio leemos que los productos ultraprocesados pueden ser adictivos y, de hecho, se consumen «claramente» en patrones adictivos. ¿Por qué? Pues porque «son muy gratificantes y atractivos» y eso se traduce en que demasiadas personas los consuman «de forma compulsiva».

En sus palabras, «Los comportamientos relacionados con los alimentos ultraprocesados pueden cumplir los criterios para el diagnóstico de trastorno por uso de sustancias en algunas personas». Estiman que la adicción a los ultraprocesados ocurre en el 14% de los adultos y el 12% de los niños y que «está asociada con mecanismos biopsicológicos de adicción y problemas clínicamente significativos».

No se quedan cruzados de brazos: proponen a los responsables políticos que implementen medidas como gravar con impuestos a los ultraprocesados, aplicar sistemas de etiquetado obligatorios en el frente del paquete o en los estantes de los supermercados o reformular los productos alimentarios. Aunque me ha gustado particularmente que insistan en que es necesario implementar no una medida aislada, sino «un conjunto de políticas» porque «ninguna política alimentaria por sí sola transformará los entornos alimentarios insalubres».

Algo que coincide plenamente con lo que detallé en mi libro Come mierda:

«Si pretendemos afrontar con cierto éxito la enorme epidemia de enfermedades relacionadas con la alimentación que asola el planeta, la educación, muy necesaria (nadie dice lo contrario), debe ir de la mano de buenas políticas públicas […] que sean integrales y que tengan en cuenta todas las intervenciones que recomiendan a los responsables políticos la Organización Mundial de la Salud o el Instituto de Investigación Internacional de Política Alimentaria por sus relevantes beneficios para la salud pública. No sirve de nada poner un parche en un agujero de una piscina de plástico que tiene decenas de agujeros. Las políticas integrales (que combinen aspectos ya citados, como la prohibición de cierto marketing, los impuestos a lo malsano, el etiquetado frontal riguroso, etc.) son efectivas cuando se aplican a la vez».

Este nuevo trabajo es importante, en parte, por la relevancia de sus autores, dado que son expertos en adicción a la comida, en fisiología de la nutrición, en señalización de recompensa intestino-cerebro, en adicciones conductuales, en trastornos alimentarios y en política alimentaria (Ashley N. Gearhardt, Nassib B. Bueno, Alexandra G. DiFeliceantonio, Christina A. Roberto, Susana Jiménez-Murcia y Fernando Fernandez-Aranda. Social, clinical, and policy implications of ultra-processed food addiction. BMJ. 2023 Oct 9;383:e075354).

Posdata (9 de diciembre de 2023): El pasado 7 de diciembre, Carles Mesa y yo hablamos sobre esta cuestión en mi espacio «Vida Sana» del programa «Gente Despierta» (Radio Nacional de España). Aquí tenéis el podcast, y aquí un resumen que ha tenido la ambilidad de hacer Lucía Zujeros para “Ciencia y futuro” (RTVE): «Vida Sana: Una de cada diez personas es adicta a los ultraprocesados».

Próximos cursos, presenciales y en streaming, organizados por Julio Basulto: http://juliobasulto.com/eventos/

 

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